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Artículos etiquetados con: vino

08Noviembre

Los vinos tintos y su elaboración

    Al igual que en los vinos blancos, una vez determinada la fecha óptima de vendimia para cada variedad, se procederá a la recogida de la uva, llamada vendimia, con el máximo cuidado con el objetivo principal de no dañar ni aplastar la uva, de esta manera se evitarán fermentaciones indeseables durante el transporte y la recepción de uva en la bodega.

    Una vez en la bodega se analizará tanto su calidad sanitaria como los distintos parámetros como son la densidad, grado, color, acidez, etc., para proceder a su clasificación y tratamiento. Seguidamente se procederá primero al despalillado, operación por la cual se separan el grano del raspón así como los posibles restos herbáceos que pudieran acompañar a la vendimia como hojas, restos de sarmientos, etc., a continuación se estrujan las uvas suavemente para pasar a los depósitos o tinajas donde se procederá a la fermentación de toda la masa.

    Los vinos tintos jóvenes se mantienen menos tiempo fermentando que los dedicados a crianza y reserva, que pueden llegar hasta 21 o 28 días en contacto con los hollejos (maceración), con el objetivo de sacar el máximo de aromas, pigmentos y taninos, que son los que van a mantener la estructura del color a lo largo de la crianza.

   Durante la fermentación es muy importante mantener la temperatura entre 25 a 28º, para evitar paradas de la fermentación y evitar la pérdida de aromas primarios, consiguiendo mantenerlos en la masa del vino. Durante todo este tiempo es importante los mecidos, dos o tres veces al día, con el fin de mojar el sombrero de hollejos, que por efecto del desprendimiento de anhídrido carbónico se desplaza a la boca del depósito y los remontados dos veces al día para mezclar, remojar y unificar toda la masa de depósito, consiguiendo también airear las levaduras aportando el suficiente oxígeno necesario para su vida que les permitan el desdoblamiento de los azúcares.

    Al finalizar la fermentación alcohólica en otras, se inicia una segunda fermentación denominada maloláctica, que es conveniente y muy recomendable para que se gane en suavidad al transformar el ácido málico (un ácido duro) en ácido láctico más suave, de esta manera se gana en estabilidad.

    Una vez terminado este proceso se procede a separar el vino de los hollejos y partes sólidas, obteniendo el llamado vino flor. La parte sólida pasa al prensado que mediante unas prensas neumáticas de membrana ejercen una suave presión para obtener el vino de prensa. En algunas ocasiones se mezclan estos dos vinos tintos debido a su gran carga en polifenoles y taninos.

    Tras un reposo adecuado en depósito, los vinos tintos jóvenes pasan a ser embotellados mientras que los crianzas y reservas pasan a las barricas bordelesas de 225 litros de roble americano y francés donde permanecerán de 8 a 10 meses en el caso de los crianzas y de 12 a 16 meses los reservas. Una vez terminada esta fase pasan al embotellado donde continua con la crianza en botella estando como mínimo 12 meses los crianzas y 24 los reservas. En esta fase se redondean y ganan en buqué, estando listos para servir.

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25Octubre

Elaboración de los vinos

    Dependiendo del tipo de vino que se quiera elaborar, ya sea blanco, rosado o tinto, y con crianza, joven o reserva, se aplicarán unas técnicas u otras con el objetivo de conseguir la máxima calidad.

   Para la elaboración del vino es muy importante conocer bien el tipo y las características de las uvas con las que se va a elaborar el vino. EL tipo de uva que se utiliza para la elaboración del vino dependerá de varios factores, tanto climáticos como de cultivo, tipo de terruño sobre el que está implantado el viñedo, forma de conducción (vaso o espaldera), densidad de plantación, exposición de los rayos solares, tratamientos que se han practicado a la viña, et.

   Si se cuenta con una buena materia prima, en la que el viticultor ha puesto los máximos cuidados para su cultivo, y nos llegue con unas buenas características sanitarias, exentas de enfermedades y de restos de productos de tratamientos fitosanitarios, si es que se les han aplicado, muchas más posibilidades hay de obtener un buen vino.

   De lo contrario, por muy buenos medios técnicos que se apliquen si no se dispone de una buena materia prima será complicado por no decir imposible, obtener unos caldos de calidad. Es muy importante el seguimiento exhaustivo de las parcelas de viñas con el objetivo de conocer sus cualidades y prever el momento más óptimo de vendimia y el destino que se le puede dar.

   No os perdáis los siguientes artículos, donde os detallaremos la elaboración de los diferentes tipos de vino. En Herguedis disponemos de una gran variedad de vinos que os iremos explicando para que elijáis el más adecuado para cada momento.

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04Octubre

Beneficios del vino para nuestra salud

    El consumo moderado del vino, sobre todo del vino tinto, cuenta con múltiples ventajas para la salud del ser humano; ayuda a contrarrestar diversas enfermedades especialmente las de corazón, y a mantener el cuerpo relajado y con una actitud positiva.

    Todos los vinos tienen sus ventajas y si se toman de manera responsable sus efectos benéficos pueden ser tanto físicos como psicológicos, es decir, una copa puede relajar a las personas después de un día de estrés y al mismo tiempo favorecer la digestión en las comidas.

    El vino tinto es la bebida con más ventajas y beneficios para la salud, a continuación te detallamos algunos de los pros que tiene el tomar una copita de vino diaria.

  • Protege contra las enfermedades coronarias y contra los accidentes cerebrovasculares isquémicos, es decir la obstrucción de una arteria del cerebro, y de la aterosclerosis, que es el endurecimiento de las arterias.
  • Aumenta el nivel de lipoproteínas de alta densidad HDL, el colesterol bueno, en la sangre. Gracias a sus polifenoles y flavonoides tiene un poder antioxidante, es decir, hace inofensivo el colesterol LDL, el malo, al impedir su oxidación.
  • Tiene una acción antibacteriana y antihistamínica, reduciendo las alergias.
  • Contiene vitaminas que combaten el envejecimiento y ayudan a tener una piel más bella.
  • Evita la formación de coágulos al producir una acción anticoagulante; mejora la circulación de sangre en el cerebro y disminuye las inflamaciones.
  • Aporta minerales y oligoelementos al cuerpo como el magnesio, zinc, litio, calcio, hierro y potasio.
  • Ayuda a la digestión de proteínas, por lo que se recomienda acompañarlo con carnes y quesos.
  • Controla las infecciones urinarias. Baja el riesgo de la formación de cálculos renales.
  • Disminuye el riesgo de padecer hemorroides; contrarresta las varices.
  • Reduce la tensión arterial y el nivel de insulina en la sangre.

   Desde luego se puede decir que unas copitas de vino nos arreglan el cuerpo. ¿Todavía te quedan dudas de porque es bueno tomar vino? Desde Herguedis  esperamos que no, pero seguiremos hablando de los beneficios que tiene el vino sobre nuestra salud más adelante.

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